jueves, 11 de julio de 2013

1. LA EDITORIAL SIN BOTAS

Hace varios años, cuando trabajé en la Hemeroteca Nacional, mi entonces compañera Guadalupe Landa me comentó su interés por realizar algún día una investigación bibliográfica sobre la editorial Botas, pues, como me dijo entonces, sigue siendo un gran misterio: Uno de esos misterios con un carácter casi de secreto de Estado.
Al aproximarme a los productos de esa editorial, me ha llamado mucho la atención, como yucateco que soy, la cantidad de autores peninsulares que ha publicado esa casa editorial, y en particular un libro de Ricardo Mimenza Castillo (1888-1943), sobre los templos redondos de Kukulcán, que vió la luz primera en 1938.
Más tarde, he tenido la ocasión de leer lo que escribieron sobre esa empresa Juana Zahar, Marco Fabrizio Ramírez Padilla y Marina Garone, entre otros que también han hecho mención.
A partir de esta indagación, en general podemos describir esta editorial con las siguientes características:
1) Inició en 1905 o 1906 como librería, luego de una venta de libros que hizo como favor quien sería su impulsor primero, don Andrés Botas.
2) En 1910 o 1911, comenzó a funcionar como casa editorial. Fue la primera en México que no cobraba a sus autores para publicarles, sino que los escogía. Según el historiador Ramírez Padilla, el primer libro publicado pudo ser ¡Crimen monstruoso!, del empresario y periodista Ramón P. Buxó, que data de 1911.
3) En 1916, don Andrés pasó la administración a su hijo Gabriel, quien se mantuvo al frente hasta los años 50.
4) El fondo editorial llegó a conformarse con cerca de tres mil obras de autores mexicanos y extranjeros. Su período de mayor esplendor fue entre los años 30 y 50. Al término de la década de los años 50, las producciones se fueron espaciando cada vez más, quizá porque sus principales éxitos los estaban reeditando otras casas editoriales.
5) Entre 1941 y finales de los años 50, publicó las obras de los ganadores del Premio Lanz Duret del periódico El Universal.
6) Las cubiertas de sus libros muestran el interés que puso esta editorial en el trabajo de diseño gráfico. Al respecto, se puede revisar el catálogo de 149 portadas de Botas que tiene en la red la biblioteca de la Universidad de Nuevo México en la siguiente dirección: http://content.unm.edu/cdm/search/collection/botas.
7) Sus tipografías van de lo geométrico a lo caligráfico, en lo cual pudo haber influido, de alguna manera, que la editorial trabajó con varios talleres de impresión.
8) Como elemento de identidad, tuvo al menos cuatro logotipos y un ex libris.
9) Hay evidencias de que el trabajo editorial y de impresión tenía algunas diferencias dependiendo de que un título se publicara a la rústica o en pasta dura. Estas diferencias se notan en los papeles de impresión, en los colores y con los acabados.
10) Publicó varios catálogos de sus publicaciones, así como de libros que vendía en su librería. Entre los conocidos están los siguientes:
1909: Andrés Botas, and Booksellers Firm. Catálogo general de "la exposición literaria", librería de Andrés Botas: esencialmente literaria y de obras científicas. Este catálogo anula los anteriores. México: Vergara número 10.
1919: Librería de Andrés Botas e Hijo. Bibliografía: boletín de la Librería de Andrés Botas e Hijo. México.
1928: Librería Andrés Botas. Andres Botas book sale catalog. México: Librería de Andres Botas.
1936: Ediciones Botas. Catálogo de las Ediciones Botas. México: Ediciones Botas.
1944-1945: Ediciones Botas. Ediciones Botas book sale catalog. México: Ediciones Botas.
1956: Ediciones Botas. Catálogo de precios. México: Eds. Botas.
1958: Librería Andrés Botas. Catálogo de libros de autores mexicanos y de libros impresos en México. México: Andrés Botas.
En 1968, con la muerte de Gabriel Botas se cerró una etapa de la editorial y cada vez fueron más esporádicas las nuevas publicaciones. De esta manera, hasta dos décadas después se dió un viraje hacia la publicación de obras consideradas de más interés para nuevos públicos.
Hace cerca de 10 años, la librería de Botas dejó sus instalaciones de la calle de Donceles, en el Centro Histórico de la ciudad de México, y se traslado al Sur de la ciudad, en la Avenida Taxqueña. En este sitio, aún quedan algunas obras correspondientes al final de su mejor  época.
Todavía falta hacer la bibliografía completa de esta editorial, con lo cual tendríamos, junto con el Catálogo histórico, 1934-2004 del Fondo de Cultura Económica, otro buen punto de observación para contemplar la variedad y la riqueza cultural del México del siglo XX.
En el cuento que Perrault recopiló en el siglo XVII, tenemos que un gato calzado con botas ayudaba a su amo a salir adelante de una manera que hoy consideramos éticamente dudosa. Este relato nos viene a cuento para comprender lo que ha ocurrido con esta editorial cuando ha querido ayudar a la Cultura Nacional para darle realce y publicidad, a fin de encumbrarla como una reina. En el camino, ha perdido las botas, y ahora no convence de sus intenciones por lo que requiere la ayuda de los bibliófilos, de los bibliotecarios y de todos los interesados en su ama Cultura.

1 comentario:

  1. Hola, acabo de dar con tu blog: Una familia Gamboa de Hoctún, me pareció muy interesante, ameno y lleno de datos que yo desconocía de mi pueblo natal. Pero qué pasó? Por qué no hay más entradas?

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